CEMA Almería. El laboratorio del neumático.
En la sierra de Gata, un espacio natural protegido, se encuentra uno de los centros de experimentación de neumáticos más importantes del mundo. Centro de Experiencias Michelin en Almería.
En el año 1973 se inauguró en el parque natural del Cabo de Gata-Nijar, el Centro de Experiencias Michelin en Almería, sobre una superficie de 4.500 hectáreas en las que empezaron a desarrollar su trabajo un equipo compuesto por 53 personas que contaba con seis vehículos de ensayo que circulaban por la única pista existente, de 3,5 kilómetros de longitud.
Han pasado ya 43 años desde entonces, y en la actualidad el Centro es uno de los más importantes de los siete que tiene Michelin en Europa, América y Asia, y un punto de referencia cuando se habla de neumáticos de camión, obra pública y maquinaria agrícola.
Aquí trabajan durante 365 días al año un equipo formado por 220 personas, y en este espacio se han habilitado más de 110 kilómetros de pistas de todo tipo (asfalto, gravilla, polvo, piedras), en terreno llano y también montañoso –un tercio de ellas-, por las que circulan a diario más de 250 vehículos de ensayo que realizan cada año más de 20 millones de kilómetros y consumiendo cinco millones de litros de gasoil y proporcionando millones de datos que entran a diario en los ordenadores.
La elección de este lugar no se ha realizado al azar. Por su situación geográfica se encuentra en una zona que posee un micro-clima especial y que ofrece el nivel pluviométrico más bajo de Europa (200 milímetros de lluvia al año), algo indispensable para poder realizar ensayos el mayor tiempo posible, pues cuando aparece la lluvia deben pararse las pruebas que se realizan fuera del asfalto. Además, en esta zona se registran temperaturas muy elevadas durante un periodo muy amplio de tiempo que se extiende durante todo el verano, alcanzándose con facilidad medias de 37º C, que son condiciones ideales para el correcto desarrollo de estos trabajos.
Cuando una de las fábricas de Michelin desarrolla un nuevo producto se envía una muestra al CEMA de Almería para comprobar que su desarrollo se ajusta a lo que se había proyectado. Una vez está el neumático en las instalaciones se procede a realizar una serie de mediciones y se prepara para realizar las primeras pruebas, que suelen hacerse en cámaras acondicionadas con medidas de seguridad muy elevadas. Cuando el neumático ha rodado 200 horas se traslada otra vez al laboratorio y se analiza el comportamiento de las distintas capas, realizando comprobaciones a través de rayos láser y ultrasonidos, para comprobar si existe algún problema.